Quizás hayas tenido la suerte de haber visto alguno de sus programas, lo llaman "el encantador de perros" y su función es equilibrar emocionalmente a perros que son hostiles, indisciplinados y hasta sordos de las òrdenes de sus propios dueños.
El tipo termina entrenando con leyes nacidas en el campo de la psicología a los dueños de estos perros, consiguiendo la armonía que el animal pide a su manera, con su lenguaje corporal y su comportamiento.
Hace poco compartí vía correo electrónico con mis contactos un mail que recopilaba frases notables acerca del comportamiento de estos animales que funcionan en manada como un verdadero equipo.
Los perros buscan un lìder entre sus pares o entre los humanos en un hogar.
Acá hay una serie de conceptos nacidos de su propia y vasta experiencia en estas lides.
Llama la atención la conexión que existe entre éste decálogo y las reglas que rigen el comportamiento de los grupos humanos.
Ejercicio, disciplina y afecto, es lo que un líder practica
naturalmente generando buena energía y armonía de convivencia.
Un líder equilibrado crea un entorno amistoso y estable, emana
confianza. La confianza requiere de lealtad y respeto.
Tenemos un
campo silencioso del que emana calma, para vivir
este campo se requiere de Intensa atención y firmeza.
Los perros
son la parte visible de nuestro estado interno, las personas también.
El
lenguaje corporal dice más que las palabras. Si dices estoy bien, pero sientes
desequilibrio, este se
transmite a través de tu postura corporal como “tensión”.
Si te
mantienes relajado, en calma pero a la vez en intensidad de atención, tienes una
percepción directa de la situación, luego las
interpretaciones y palabras serán mas acertadas.
La energía
que emanamos surge de un campo silencioso y es leída sin distorsión por los
perros, también
por otras personas, pero no siempre es bien interpretada. Debes
aclararte que sientes, para que esa claridad sea la comunicación con otros.
El cuerpo
no lo es todo, un chihuahua de 1, kg y medio puede dominar y controlar a un
mastín de 90 kg. La actitud mental y la energía es la diferencia.
Si no
confías en el otro, ¿por qué el otro confiaría en ti?
La
desconfianza es evidente en la actitud, la mirada desconfiada, la forma
vigilante pero
defensiva y acechante, es una forma de culpar al otro, que dice “sospecho
de ti”.
Cada paso
del camino puede presentar un nuevo y desconocido reto, puede ser
algo inesperado, como una brisa o fuerte viento que desvíe tu rumbo
momentáneamente, pero si te mantienes en calma, logras el
resultado, tu meta, tu objetivo.
Es común
el miedo y ansiedad por mantener el control, así fuimos condicionados o
limitados, solo encuentra el equilibrio y calma interior, no significa ser
un holgazán, sino
proyectar ese estado al entorno y a las personas, y automáticamente el miedo
desaparece.
Sentirse
mal por el mal comportamiento no ayuda, solo alimenta eso que quieres cambiar.
Hay
(perros) personas imposibles de ser motivadas porque están en (la
manada) el equipo equivocado.
Estemos
tranquilos, pero firmes y con una intensa atención que nos mantenga
centrados
para ver
con claridad “que sucede” aquí y ahora.
Si sientes
inseguridad, pones nerviosos a aquellos a los que te acercas.
Cuando
eres excesivo en tu entrega de cariño de forma repetitiva, sin
distinguir cuando es apropiado y cuando no, aumentas la inestabilidad.
Tenemos un
potencial inimaginable para mejorar, esta en nuestro ADN.
Las
personas calmas y sin prejuicio, son un imán para otras personas, son el
espacio de confianza para que los otros “sean”.
Los
humanos tergiversamos los hechos, humanizamos los eventos, el motivo
es la carga emotiva que traemos, para evitarlo necesitamos
despertar el instinto.
Es más
fácil rehabilitar a un agresivo que a un inseguro, el
inseguro suele estar frustrado por malas experiencias que no quiere
soltar, el
agresivo en cambio cuando siente que no es atacado y no existe peligro, cambia su
energía sin titubear.
Ser el líder es
asumir 7 responsabilidades básicas:
1-proteger
al equipo
2-mantener
vigente la confianza
3-comprender
las necesidades de cada integrante,
4-ayudar a
c/u con equilibrio a
superarlas
5-no
caer en el afecto excesivo y complaciente,
6-decir
la verdad sin perder la calidez
7-unir
las fuerzas psicológicas y físicas
hacia un fin común.
La clave
de cualquier rehabilitación en todo sentido, es conseguir vivir el presente.
El presente material me fue enviado vía correo electrónico por una persona especial que responde al nombre de Gustavo.